lunes, 3 de enero de 2011

Santiagueña

Hermosa santiagueña, tus ojos son tan bellos, tu bello cuerpo revolucionario, tus ojos que parecen lagos, me es prueba definitiva de que existe el paraiso si tan solo te veo caminar.
Como no amarte a ti.
Tu sola existencia hace verdad que este mundo es el paso obligado de las tentaciones. Sinuosa, espectacular, tu danza es la sensualidad, santiagueña hermosa.
Pequeña, diurna e inmóvil, miro una fotografia tuya, de apacible apariencia, abandonado a tu sueño y a tus alas, quiero persistir, porque hoy me siento amargo en este hartazgo que siento por el mundo.
Tus ojos tienen una tristeza, es como si te faltara el mar para que pudieras ser feliz.