viernes, 29 de abril de 2011

Para una Gitana

Puedes decir mi nombre, leerlo en mis ojos.
De alguna manera, todo esta escrito, en algún sitio, algún libro profano.

El destino tiene letras borrosas.

Puedes decifrar en mi mano un signo, decirme lo mas favorable de mi fatalidad.

Puedes también combinar silabas y traer desde mi subconsciente palabras que he pensado, lugares que he deseado, amores que he escondido.

Puedes, mirarme con tus bellos ojos y me puedo intimidar, decirme con claridad mis temores mas elocuentes, los mas lógicos, los mas razonados.

En una tarde frente al mar de cara al sol, puedes decifrar lo que yo he tardado muchos años en comprender.

Elegantemente hiciste ademanes, al mirarme custodiabas sectores de mí mismo inacabados.

Aun puedes decirme que me has visto perseguir el sueño, caerme una y otra vez, ponerme merteolate en las rodillas, buscar donde llorar callado, sin hacer ningún ruido, sin que nadie me descubra, sin que nadie me pregunte por lo que me ocurre.

Puedes solo decir mi nombre y puedo pensar que me puedes decir todas las cosas también...

Pero no quiero que me digas nada.

No quiero que descubras el velo de todas esas cosas que se encuentran ocultas y resueltas ya, las espero de buena gana.

Esta tarde frente al mar, continué mi inconsciencia y mi ignorancia bendita.

Esta tarde sentí que podía saber mas.