martes, 19 de abril de 2011

El mucho amor.

Por el mucho amor que me tienes, lo mucho que yo te extraño, no me hace daño.

Te habrás ido y estarás mejor en este viaje que no tiene retorno.

Por el mucho cariño que tuviste, hoy te has quedado conmigo para siempre.

Ya no estas en este mundo terrenal, pero me has enseñado todo, incluso que la natural función del cuerpo es morir.

Me has preparado bien, sí, sucede que te pienso y a menudo lloro tu ausencia y tus palabras que han quedado en mi alma las rememoro, como rememoro las noches en que sufrías por nosotros, tus hijos e hijas

Tu fuerza y determinacion, tu etica y honorabilidad, tu fé, como si siempre hubieras estado sola y así, solita te has ido, callada noche, triste amanecer, amada, tu no hubieras querido ir sin antes habernos perdonado. Asi que durante tres años preparaste tu partida.

Amada y dulce querida, te has quedado dormida, como dormidos también están tus dolores, no llorare demasiado para no despertarte, este sueño tuyo tiene toda la paz, porque allá a donde estas, sabes que lo has hecho bien, que has cumplido el final de una jornada exitosa.

Tu que siempre me has amado, hoy que te extraño, lloro, te invoco, que te requieren todos mis movimientos y que mi vida me es tan ausente como tu presencia, quiero agradecerte y sonreir por todas las cosas que me has dado de esta vida.

No te preocupes por mí, estaré bien.

Por el mucho amor que me tienes, lo mucho que yo te extraño, no me hace daño.